– por Victoria Lagos, Docente Nivel Secundario

Vivir presente me permite ver el mundo con otros ojos, me permite estar viva en la experiencia, latir en la experiencia. Estar presente en el presente, me permite vivir con sencillez y humanizar cada acto, cada vivencia.

La docencia es una vocación en la que presenciar es la ley primera. Presenciar el aula, los alumnos, las propuestas. Presenciar las particularidades, las dificultades, los desafíos y el afecto. Presenciar el proceso de aprendizaje y los vínculos desde el amor, de esto se trata, de presenciar, de estar presentes en cada momento presente.

Estar presente me permite ver las diferencias sutiles y transmitir sutilezas, me permite trasmitir experiencialmente, hacer de la enseñanza una experiencia enriquecedora, hacer del aprendizaje una experiencia vivida.

Al presenciar me humanizo, humanizo los actos, por lo tanto, al presenciar humanizo el aprendizaje, los vínculos y el espacio. Todo lo conozco humano y como humano lo abrazo desde el corazón.

Estar presente es eso, es poner el corazón, es que el corazón esté presente en el presente para conectar con uno, con el aprendizaje, con los que están a mi lado y con todo el universo que me rodea. Desde la presencia del corazón, uno conecta verdaderamente, empatiza y potencia los vínculos y, en consecuencia, se potencian los aprendizajes y las experiencias. Al poner el corazón, el vínculo con los jóvenes se vuelve simple, pero infinitamente profundo, y al estar el corazón latente en cada momento podemos experimentar el compromiso genuino con uno, con los otros y con las inmensas ganas de aprender y conocer el mundo.

La presencia es la conexión verdadera, al ser los adultos que acompañamos quienes cultivamos el estar presentes en el momento presente, permitimos que la presencia sea cultivada también por los jóvenes y los niños. Al estar presente, hago de la experiencia, una experiencia profunda, vivida e inolvidable.

¿Qué más puedo anhelar para los alumnos que las ganas inconmensurables por descubrir y presenciar la vida y el mundo?